La inversión sanitaria traspasa ideologías el 12M para llegar al 7% del PIB

Los portavoces de seis partidos han presentado sus propuestas de políticas sanitarias en un debate este miércoles organizado por la Associació Catalana d'Entitats de Salut (ACES) en la Cambra de Comerç de Barcelona de cara a las elecciones del 12 de mayo. Financiación, listas de espera y accesibilidad, déficit de profesionales y burnout, Salud Pública y la colaboración del sector privado en el sistema han sido las principales cuestiones que se han abordado, coincidiendo todos ellos en alcanzar un mínimo de financiación del 7 por ciento del PIB para sanidad.

La portavoz del PSC-Units, Assumpta Escarp, ha destacado que la diferencia entre la partida presupuestada y el gasto real es de entre "2.500 y 3.500 millones de euros al año", por lo que se debería "decidir el porcentaje del PIB catalán que le dedicamos a sanidad, que vendría a ser de un 7 por ciento". El objetivo, en una medida acordada en el Pacte Nacional de Salut, es "acercar el gasto presupuestado al real, acompañado de mejoras en la gestión y una auditoría".

Por su parte, el portavoz de ERC, Jordi Albert, ha defendido la gestión de la Generalitat y el presupuesto presentado para 2024, que incluía una partida de 800 millones de euros para compensar las diferencias entre el gasto previsto y el real. Albert ha remarcado la "falta de financiación por parte del Estado e incumplimiento" en la renovación del modelo creado en 2014. Además, he incidido en que Salut ha sido una de las partidas que más ha crecido en los dos últimos presupuestos.

Jordi Fàbrega, diputado de Junts per Catalunya, ha detallado el porcentaje del PIB que se destina de media en España y en la OCDE, que está por encima del 8 por ciento. "Para tener la media de la OCDE, nos faltarían 7.400 millones de euros", ha señalado. Fàbrega, que ha alertado del déficit fiscal catalán, ha manifestado que "para gestionar todos los recursos el mejor camino es la independencia", aunque por ahora se debe "hacer una financiación plurianual" y "mejorar la gestión".

La portavoz de Vox, María Elisa García, ha criticado que "el déficit de financiación no es tanto" debido, a su criterio, que "la Generalitat tiene en Salut 116 altos cargos con sueldos por encima de 100.000 euros". En ese sentido, ha hecho hincapié en que "dinero hay, pero hay que invertirlo en personas, salud e infraestructuras".

También Núria Lozano, portavoz de Comuns Sumar, ha manifestado la importancia de alcanzar el porcentaje del 7 por ciento del PIB de Cataluña para sanidad, aunque también ha lamentado la falta de ejecución del Govern en algunas partidas, como salud bucodental. Por último, la portavoz del PP, Eva García, se ha puesto como objetivo llegar a la media de España, que es del 7,7 por ciento del PIB. "Aspiramos a tener un Govern que utilice los recursos que tiene de la mejor forma posible", ha detallado.

Listas de espera y déficit de profesionales

En cuanto a las listas de espera, Albert ha vuelto a defender la mejora de la evolución con el Govern de ERC en los dos últimos años, a la vez que ha instado a "invertir en Atención Primaria y Comunitaria y Salud Pública para tener capacidad para reducir" las demoras. Además, ha destacado el Plan de Accesibilidad y el uso de todos los servicios para sacar el máximo potencial. Por su parte, Fàbrega ha abogado por "pagar para que la gente esté sana" y no por actividad, reducir las esperas para visitar al médico de Familia y ampliar las cláusulas de garantías.

En el caso de García, ha denunciado que para reducir las listas de espera se "necesita un gestor que conozca bien el sistema de salud y desde abajo, no como Balcells". Para atajar este problema, ha declarado que "la colaboración público-privada es indispensable", además de aumentar el número de profesionales sanitarios. Lozano, de Comuns Sumar, ha indicado que una de las mayores dificultades es que el "sistema está orientado en la enfermedad y no en la prevención" y ha adelantado que en "nuestro programa nos marcamos como objetivo sustituir la colaboración público-privada en el horizonte de diez años".

En representación del PP, García ha lamentado las cifras que sitúan a Cataluña como una de las peores comunidades autónomas en cuanto a las listas de espera de España y ha planteado "realizar intervenciones no urgentes en un máximo de sesenta días". Escarp ha alertado de la insatisfacción creciente de la población, que ha admitido que le preocupa, y ha reflexionado que, aumentando la capacidad de diagnóstico de Primaria, "seguramente reduciríamos la espera".

Sobre el déficit de profesionales, Fàbrega, de Junts per Catalunya, ha criticado que la burocracia es un "problema muy bestia", además de proponer "pagar mejor" a los profesionales para retenerlos. García, de Vox, se ha mostrado contraria a importar profesionales extracomunitarios y a favor de incentivar la formación continuada en jornada laboral, así como no "criminalizar" desde la política a los sanitarios. Por su parte, Lozano, que también ha coincidido en facilitar la formación continuada e incentivar trabajar en zonas rurales, ha puesto sobre la mesa la falta de sanitarios de diferentes categorías, médicos, enfermeras, matronas, psicólogos y odontólogos.

Por su parte, Eva García, del PP, ha lamentado que Cataluña lidera la "huida de médicos y enfermeras de España" y ha expresado que por culpa del catalán "no somos capaces de retener talento o atraer profesionales". Escarp ha propuesto preguntar más a los profesionales sanitarios para conocer su visión, a la vez que ha manifestado su preocupación por las plazas vacantes del MIR. En el caso de Albert, que ha destacado la mejora de condiciones laborales y salariales con la inversión de 800 millones de euros, ha reclamado la competencia de Formación Sanitaria Especializada, además de descartar que el catalán sea un obstáculo.

Salud Pública y colaboración público-privada

Por último, sobre Salud Pública y colaboración público-privada, la portavoz de Vox ha alertado que "no estamos preparados para una pandemia porque no se han analizado los problemas", posicionamiento compartido con la portavoz del PP. Lozano, en su caso, ha abogado por doblar la inversión en Salud Pública, hasta el 3 por ciento.

Escarp, del PSC-Units, ha defendido el papel de profesionales y gestores sanitarios durante la pandemia y ha planteado reforzar la Agència de Salut Pública de Catalunya, sobre la cual también Albert ha manifestado que es necesario desplegarla. Fàbrega ha adelantado que Junts per Catalunya propone alcanzar "el 5 por ciento en Salud Pública".

Sobre el papel del sector sanitario privado y su relación con el público, Escarp ha defendido "un sistema de titularidad pública con formas de gestión mixtas", mejorando los sistemas de concertación y contratación. Albert ha remarcado su propuesta de un sistema con "titularidad y provisión pública con máximo control de la calidad del servicio", mientras que Fàbrega ha pedido "no demonizar al sector privado". En esa línea, García, de Vox, ha expresado que "tenemos mucho que aprender de la gestión que hace la privada"; Lozano, de Comuns Sumar, ha sostenido que su modelo "plantea un sistema de salud público tanto en titularidad, prestación, provisión y control"; y, finalmente, García, del PP, ha abogado por la "colaboración público privada con concertación con afán de lucro, procesos con transparencia e incentivos fiscales para mutuas para descongestionar el sistema público".