La paciencia de los trabajadores de los
ambulatorios que han sido designados como colegio electoral para el próximo 1 de octubre, fecha prevista para el referéndum ilegal, parece estar llegando a su fin. Redacción Médica se ha puesto en contacto con empleados de los mismos, que han sido
muy claros en su descripción de la situación: “Estamos hasta los cojones”.
Según relatan a este medio, al hecho de que las centralitas se bloquean con frecuencia por llamadas que tienen que ver con la cita electoral, se suma que
los Mossos d’Esquadra ya se han personado en algunos de estos CAP debido a la instrucción que ha dado la Fiscalía.
“En muchos de estos centros no está el responsable de que se abra o no el ambulatorio para el referéndum”, explican. Esto se debe a que tales directivos con capacidad para dar la orden son en realidad los gerentes de las áreas de salud a las que pertenecen los centros.
“El coordinador está sujeto a la dirección de gerencia”, sentencian sobre esto.
La
presencia policial en los centros sanitarios es la situación que más ha intranquilizado y enfadado a los empleados.
“Vienen al administrativo para hacerle firmar un papelito en requerimiento de información por la Instrucción 5/2017 de la Fiscalía Superior de Cataluña”, comentan. Un hecho que abre una reflexión importante: “Lo están haciendo mal porque le hacen firmar a personal como responsables del centro cuando no van a estar el domingo ni son el jefe”. “Con ese papel le deben decir a la Fiscalía
‘oye, mira, ya hemos hecho el trabajo que nos mandáis señor fiscal’”, añaden.
Una realidad en la que pueden estar
hasta 80 ambulatorios en toda Cataluña, una vez que el Govern presidido por
Carles Puigdemont hizo públicos los lugares designados como colegio electoral para la cita separatista, declarada ilegal por el Tribunal Constitucional.
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