El Parlament de Catalunya ha aprobado una moción del PSC que exige al Govern la adopción de "medidas urgentes" para estabilizar a los profesionales eventuales del sector de la sanidad pública a lo largo de 2017, incluyendo las plazas necesarias para cubrir la totalidad de las bajas estructurales por jubilación. El pleno parlamentario aprobó la totalidad del documento sobre la precariedad laboral y conciliación de los profesionales sanitarios, promovida por los socialistas catalanes.
Entre otras cuestiones, la moción insta a que, de acuerdo con el Plan de Garantía de Estabilidad Laboral, el gobierno de Puigdemont adopte con carácter urgente medidas para estabilizar a los profesionales del sector sanidad de titularidad pública (sanidad pública, Institut Català de la Salut (ICS), EPiC -empresas públicas y consorcios- y empresas municipales). Punto que ha contado con apoyo de todos los grupos, excepto la abstención de CUP y SíQueEsPot.
Además, por unanimidad, el Parlament emplaza al Ejecutivo catalán a "velar por adecuar, en todo momento y de manera sostenible, la estructura de las plantillas de las entidades públicas de la Generalitat del sector salud a las necesidades de la ciudadanía".
En otros puntos, se exige "priorizar la consolidación de profesionales de enfermería y de facultativos del ámbito de la atención primaria, en tanto que colectivos especialmente afectados por la interinidad, en la convocatoria de oferta pública de empleo para este 2017".
En el marco de los órganos de negociación colectiva, se pide también priorizar la convocatoria de plazas destinadas a atención primaria, que garanticen la adecuada dimensión de las plantillas de los Equipos de Atención Primaria (EAP) hasta llegar a la dotación estable suficiente para cubrir el 100 por ciento de sus plazas habituales, y el despliegue en todo el territorio de la atención domiciliaria.
La moción socialista emplaza a garantizar, antes del 31 de julio de 2017, que no se produzcan en el ICS nuevas contrataciones de personal eventual para cubrir necesidades estructurales; o hacer un análisis de viabilidad sobre la posibilidad de reducir la jornada laboral de los profesionales del sector salud a 35 horas semanales, creando mecanismos de flexibilización para facilitar la conciliación.
Para reducir las estructuras burocráticas, se pide disolver las Unidades de Gestión de Atención Primaria (UGAP) y recuperar las direcciones de los Equipos de Atención Primaria (EAP), disminuyendo las tareas burocráticas de éstos, y disolver las direcciones de los Servicios de Atención Primaria (SAP).
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