El exconsejero de Salud catalán sigue defendiendo su
huida y todo lo acontecido tras ella. Este lunes, en rueda de prensa,
Antoni Comín ha asegurado que no ve incoherente aceptar la retribución de fin de contrato con su consideración personal de que aún es consejero legítimo en el cargo con la siguiente comparación:
"Sería como caer en el error de la víctima de violencia de género que cuando le duele la herida tiene sentimiento de culpabilidad".
Tampoco se considera un cobarde:
"Estar en el exilio es de valientes, y estar en la cárcel, también", ha predicado y ha dejado caer que
"quien quiso ir a Bélgica pudo hacerlo y quien quiso quedarse tuvo la opción hasta justo la noche antes" de tener que declarar en Madrid. Comín, además, asegura que
vive de ese finiquito que cobró, pese a que
no se siente "destituido"
Estas controvertidas declaraciones del exconsejero han sido vistas como respuesta al cabeza de lista de ERC, Oriol Junqueras, encarcelado, que dijo en una entrevista que
él "no se esconde" y "da la cara", unas palabras que muchos han leído en clave de crítica a la fuga de Puigdemont y de los otros miembros de la anterior Generalitat.
Este encuentro con la prensa ha sido convocado tres días antes de las elecciones del 21D para hacer balance de su tarea al frente de de Sanidad
hasta la aplicación del artículo 155 de la Constitución. Comín admite que
han aumentado las consultas por estrés y ansiedad de ciudadanos desde el comienzo del "procés" y añade que él mismo impulsó una unidad de gestión de esta crisis en el mes de octubre.
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