El consejero de Salud, Antoni Comín, ha puesto en valor el sistema sanitario catalán este jueves en su intervención al pleno del Parlamento, después de que salieran a la luz las grabaciones que implicaban al ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz. “Es una joya, que se ha hecho con el esfuerzo de muchas generaciones” ha afirmado el consejero antes de remachar que “no nos lo destrozarán”, en referencia a las afirmaciones del ya exdirector de la Oficina Antifraude de Cataluña, Daniel De Alfonso, en las citadas conversaciones con el titular de Interior.
En respuesta a una interpelación de Junts pel Sí, Antoni Comín ha destacado también los valores de “cohesión social” y de “garantía de igualdad de oportunidades y de igualdad de ciudadanía” que supone el sistema sanitario para la sociedad catalana. Para el consejero, el modelo sanitario catalán es un “buen modelo, más allá de su infrafinanciación” y ha destacado la diversidad de proveedores como una de sus principales virtudes, que permite que “las fortalezas de los unos se equilibren con las fortalezas de los otros”. También ha subrayado el aprendizaje recíproco de estos mismos actores.
En la misma línea ha remarcado que la diversidad de proveedores “no es un problema de nuestro modelo” y ha recordado que hay unos criterios de ordenación que emanan de la de la Ley de Ordenación Sanitaria de Cataluña (LOSC). En este sentido, ha defendido este principio de doble preferencia que prevé la LOSC: uno de "preferencia" de los proveedores públicos respeto los privados; y un segundo, también de "preferencia" de los proveedores sin afán de lucro por encima de los que tienen afán de lucro, que es principio interno dentro de los proveedores privados. Comín, en cualquier caso, ha querido aclarar que el principio de preferencia no es un principio de exclusión: “Nadie está excluido, cabe todo el mundo si lo necesitamos”.
“Tenemos una flota que es diversa y la gracia de esta flota es que en medio tiene un buque insignia, la EQUIS, las empresas públicas”, ha apuntado el consejero, que ha añadido que precisamente “esto ha hecho nuestro sistema sanitario: la capacidad de construir desde la diversidad”. Una diversidad, ha explicado Comín, que se fundamenta en tres valores: la equidad, la calidad y la eficiencia. "No hay un valor más importante que otro. Los tres son irrenunciables y por eso hablamos de un triángulo”. Por todo ello, Comín ha afirmado que si se tuviera que volver a inventar el modelo sanitario catalán, “probablemente lo tendríamos que volver a hacer tal y como es ahora”.
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