La Generalitat ha decidido instaurar de nuevo el
mando único sanitario dentro de su territorio, convirtiéndose así en la
segunda comunidad autónoma tras Aragón que decide volver a usar esta medida para afrontar la segunda ola del Covid-19 con los suficientes recursos materiales y humanos.
"El director del Catsalut va a firmar una instrucción para integrar funcionalmente y de manera temporal bajo la gerencia pública las mutuas de accidentes de trabajo y los centros de la sanidad privada", así lo ha anunciado el secretario general de Salud de la Generalitat, Marc Ramentol, en una rueda conjunta con Jacobo Mendioroz, director de la Unidad de Seguimiento del Covid-19 en Cataluña, para analizar la situación epidemiológica en la región.
"En la primera ola se hizo y fue una medida exitosa", ha comentado Ramentol. Los motivos que llevan a la consejería de Salud catalana a tomar esta medida son las previsiones de un aumento en la presión asistencial, que actualmente cuenta con el 87% de las camas UCI ocupadas. "
Nuestros escenarios en cuanto a presión asistencial nos dicen que esta continuará aumentando en los próximos días y semanas, y debemos adelantarnos", ha explicado.
"Estamos notando un efecto leve de las medidas tomadas, pero esto no afecta al hecho de nuestro
sistema sanitario público continuará soportando una presión asistencial que corre el riesgo de comprometer la actividad asistencial no relacionada con el Covid. Esto nos ha determinado a tomar esta instrucción para la integración temporal", ha comentado el secretario de Salud.
Después de la primera ola, la consellera de Salud, Alba Vergés, anunció una auditoria para evaluar la financiación de los hospitales privados, pero Ramentol ha explicado que tendrán que esperar los resultados de dicha auditoria. Sin embargo, ha defendido que, del mismo modo que se hace con el resto de centros sanitarios de la red pública de salud, debe haber
"igualdad de condiciones" en el aspecto retributivo con los nuevos actores que se incorporan.
El pico de contagios ya se ha alcanzado
Por su parte, Medioroz ha explicado que
el pico máximo de contagios ya se ha alcanzado, pero que las consecuencias en la presión asistencial tienen otros ritmos. "En torno a dos semanas se producirá el pico en los ingresos hospitalarios. En cambio, en las UCI el pico tardará más en llegar porque la duración de la infección de una persona es mucho más largo y se produce una acumulación. Por lo tanto, la subida es más lenta pero la bajada también", ha explicado.
A partir de mañana los datos públicos incluirán las camas privadas que atienden a enfermos críticos de coronavirus. Actualmente, hay 541 personas ingresadas en camas de UCI en toda Cataluña, 471 de los cuales son pacientes de Covid-19. Esto supone que el virus ocupa el 57% de la red de unidades de cuidados intensivos disponibles.
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