Ninguna de las 2.500 plazas de empleo público para sanitarios que ha anunciado este lunes la secretaria de Administración y Función Pública de la Generalitat,
Meritxell Masó, serán de nueva creación. Así lo explican fuentes de la misma administración que confirman que esa oferta se ajusta únicamente a la
tasa de reposición que por ley se permite desde el ministerio de Hacienda, y que en ningún caso se prevé superar.
De este modo, el total de plazas que el
Govern puede convocar “en breve” se estima en 7.500, que corresponderían a la suma de
ofertas de empleo que quedaron sin convocar de 2015 y 2016. Según detalla Masó, serán oposiciones para nuevas plazas y para puestos cubiertos ahora de manera temporal en "servicios esenciales", como 2.500 plazas de personal médico y de enfermería, 2.000 docentes, 500 Mossos d'Esquadra y 150 bomberos, entre otros.
Sin embargo, según confirman fuentes sindicales presentes en la
Mesa General de Negociación de los Empleados Públicos, no se ha detallado la cifra exacta con la que contará la OPE catalana, que
ya anunció el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, en octubre, pero esperan que “este distribuida de forma precisa para la próxima semana”. En referencia a la creación de nuevas plazas anunciadas por Masó, dichas fuentes las atribuyen a “un total de 1.000, que en todo caso irían destinadas a aumentar la plantilla de los
Mossos d'Esquadra y docentes”.
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