Redacción. Barcelona
Un total de 200 farmacias de Barcelona realizarán pruebas a sus pacientes para identificar factores de riesgo cardiovascular a diez años, en el marco del programa Farmacardio, un proyecto pionero en España. Se trata de una iniciativa impulsada en marzo de 2014 y fruto de un convenio de colaboración entre el Colegio de Farmacéuticos de Barcelona (COFB)  y Mutua General de Cataluña, que ha pasado de contar con 55 farmacias adheridas a 200 establecimientos, una cifra que crecerá en los próximos meses.

Jordi de Dalmases, presidente del COFB.

En la prueba piloto, que arrancó en el distrito de Sarrià-Sant Gervasi con 55 farmacias, se han detectado 100 casos con riesgo cardiovascular bajo o moderado, y ocho con riesgo alto o muy alto, del total de 133 personas que se analizaron.

Este servicio, que se ha extendido a toda la provincia de Barcelona tras el éxito de la prueba piloto, está abierto a hombres y mujeres de entre 35 y 74 años sin ningún antecedente personal de enfermedad de origen cardiovascular diagnosticada por un médico.

Uno de los "puntos fuertes" de este programa es que gracias a la accesibilidad, confianza y proximidad al usuario, las farmacias se convierten en el escenario idóneo para acercar la prevención a un colectivo más amplio, como personas sin aparentes problemas de salud y que no acuden al médico de forma habitual, aunque pueden tener riesgo cardiovascular.