La Consejería de Sanidad ha decretado el cierre cautelar del área quirúrgica del Hospital Recoletas, de titularidad privada al haber detectado deficiencias. El expediente fue abierto por la Inspección Provincial de Cuenca durante una de las inspecciones periódicas que se realizan en todas las instalaciones sanitarias, según han explicado fuentes del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (Sescam).
El cierre cautelar, acompañado de una serie de exigencias, se decretó el 22 de diciembre. Una vez la empresa haya subsanado las deficiencias se podrá levantar la suspensión. La dirección cree que esto podrá producirse antes del fin de semana, ya que para entonces espera “aportar la documentación” que garantiza la ejecución de las modificaciones que exige el Sescam.
Según ha explicado a Europa Press el director gerente del complejo sanitario, Pedro Javier Montero, las "deficiencias" se deben a la "evolución de la normativa" y al incremento de la complejidad de las intervenciones, lo que obligaba al centro a "actualizarse". El gerente ha lamentado este cierre, que genera “alarma”; ya que, según ha asegurado, el hospital ya estaba “acometiendo un plan de obras” para adaptarse a la normativa.
Por otra parte, el Sescam ha confirmado que el cierre no está afectando a la actividad quirúrgica habitual del Hospital Virgen de la Luz de Cuenca, ya que no se derivan pacientes quirúrgicos desde el centro hospitalario público al Hospital Recoletas.
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