Ricardo Martínez Platel.
La Junta mantiene firme su propósito de devolver a los funcionarios la jornada semanal de 35 horas a partir del próximo 1 de enero. Así se desprende de la mesa técnica que ha celebrado la Administración con los sindicatos para establecer el plan de trabajo que llevarán a cabo para desarrollar esta medida.
José Luis Grau, presidente autonómico de CESM.
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Cuestionado por la base jurídica para poner en marcha la iniciativa, el Gobierno regional entiende que el Estado puede gestionar y decir los horarios que tiene su personal, pero desde la transferencia de la competencias creen que la jornada es potestad de la Junta. En su momento, el presidente Emiliano García Page señaló que tenían “planteada la decisión y hecho el estudio” respecto a la eliminación de las dos horas y media.
Sin embargo, en el seno del Ministerio de Hacienda y Administraciones Pública no opinan de la misma forma. Fuentes cercanas a estar cartera consultadas por Redacción Médica han señalado que si Castilla-La Mancha pone en marcha esta iniciativa vulneraría una norma básica del Estado y, por tanto, no puede hacerlo. A pesar de esto, si el Gobierno de García Page decide seguir adelante el Ejecutivo central recurrirá la norma ante el Tribunal Constitucional.
Esta reducción de la jornada laboral, se sentirá especialmente en el ámbito sanitario, pues exigirá un aumento de la contratación de profesionales, alrededor de 300, para hacer el mismo trabajo que se hacía hasta ahora.
No obstante, desde CESM afirman que “es imposible hacer una estimación porque no han concretado nada desde Sanidad”. El sindicato espera que la consejería establezca criterios que permitan evaluar el número de efectivos para cubrir la demanda asistencial.