El director general de Asistencia Sanitaria de Castilla-La Mancha, José Antonio Ballesteros, ha asegurado que ningún paciente “espera más de 24 horas en urgencias” antes de ser subido a una habitación. Ballesteros ha comparecido en la Comisión de Sanidad de las Cortes regionales para analizar el último año de listas de espera, donde ha insistido en el compromiso de su gobierno con la “transparencia” en la gestión de las listas.
En este sentido, ha recordado la puesta en marcha del Portal de Transparencia y Salud, a través del cual se articula el derecho de acceso a la información pública “generando total transparencia a la hora de explicar la gestión realizada, los resultados conseguidos y los recursos empleados, para infundir confianza en los ciudadanos”.
El director de Asistencia Sanitaria ha defendido en que los datos de listas de espera del mes de junio, 102.111 personas, son los mejores de la serie histórica de los últimos años. “El actual Gobierno de Castilla-La Mancha ha reducido en el primer año de gobierno las listas de espera que heredamos del anterior ejecutivo en 4.343 personas”, ha afirmado.
Incremento de actividad
Ballesteros ha explicado esa reducción de las listas de espera por el incremento de la actividad asistencial. De acuerdo con las explicaciones dadas a la comisión, las comparativas interanuales del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (Sescam) reflejan, en el caso de las consultas externas, un incremento del 8,8 por ciento con respecto al mismo mes del año anterior, pasando de las 102.596 consultas nuevas vistas el pasado año a las 111.595 del presente mes de junio.
“Nunca me había encontrado con variaciones de actividad asistencial interanual del 61,6 por ciento como ha sucedido en el Hospital General de Villarrobledo, donde se ha pasado de 2.826 consultas nuevas en 2015 a 4.566 pacientes valorados en junio del presente año”, ha afirmado.
Según ha detallado Ballesteros, la actividad quirúrgica en el conjunto de la región se ha incrementado en un 5,5 por ciento entre junio del año pasado a junio de este año, pasando de 11.668 pacientes en junio de 2015 a 12.310 en el actual. Por lo que respecta a técnicas diagnósticas, la variación en el semestre se cifra en un 1,1 por ciento.
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