El consejero de Sanidad, Antonio María Sáez Aguado, ha asegurado este miércoles que ha pedido información sobre la administración a un bebé de dos meses de una vacuna prevista para niños de 14 años, aunque destacó que se encuentra ya en su domicilio, tras ser ingresado el pasado jueves, 27 de abril, en el Hospital Universitario de Burgos (HUBU), y que el impacto no fue «importante».
En ese sentido, Sáez Aguado ha explicado en declaraciones a Ical que ha pedido que se ratifiquen los datos difundidos este martes, si bien insistió en que no sabe si la información facilitada por fuentes cercanas al caso se ajustan a lo ocurrido. Por ello, el consejero sostuvo que pedirá toda la información para determinar si fue un error, con el objetivo de evitar que se vuelva a producir.
Asimismo, el titular de Sanidad destacó que se suministran “miles de vacunas” por parte de los profesionales del sistema de salud de Castilla y León sin que se produzcan situaciones de este tipo. No obstante, Sáez Aguado recalcó que lo más importante es que “no vuelva a ocurrir”.
El padre de la niña de dos meses presentó el sábado, 29 de abril, una denuncia por una supuesta negligencia médica contra la enfermera del centro de salud de Melgar de Fernamental (Burgos) ya que consideró que “la supuesta equivocación del personal sanitario, al ponerle a su hija de dos meses una vacuna para niños de 14 años, originó que su hija tuviese que ser trasladada inmediatamente al HUBU”. Según las citadas fuentes, la niña de dos meses deberá permanecer «en reposo total», durante, al menos un periodo de 15 días.
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