La Consejería de Sanidad ha mejorado el protocolo de extracción de muestras de sangre ante casos de presunto consumo de alcohol o drogas con repercusiones legales vinculadas fundamentalmente a accidentes de tráfico con el objetivo de corregir "una serie de deficiencias" en las instrucciones actuales, garantizar la calidad del procedimiento y dar una mayor seguridad jurídica al proceso.
Según ha explicado el consejero de Sanidad, Antonio María Sáez Aguado, el Servicio de Salud de Castilla y León había detectado "algunos puntos críticos" en los que no se cumplían los requerimientos que exige la Ley para los análisis toxicológicos con interés judicial.
Por esta razón, se ha optado por revisar y mejorar el protocolo que la Dirección General de Tráfico (DGT) presentará ahora en otras comunidades como "ejemplo" por ser "muy exhaustivo y completo" y por establecer un proceso "seguro y trazable" en la extracción, custodia y análisis con interés toxicológico y legal.
Un nuevo protocolo
Para desarrollar el nuevo protocolo, la consejería ha contado con el asesoramiento de expertos de la Dirección General de Tráfico, de la Guardia Civil, de la Policía Municipal y de jueces, fiscales, forenses y expertos en análisis de drogas y alcohol del Instituto Nacional de Toxicología con el objetivo de evitar los casos de anulación de pruebas por falta de una custodia con garantías.
Con este nuevo protocolo, cuando el análisis lo solicita la persona a la que se le ha hecho un control por las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, el médico rellena un formulario y la enfermera extrae la muestra; el formulario también lo firma la enfermera y el policía o guardia civil que le ha acompañado, así como el particular.
Esa muestra la lleva la persona de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y la remite al laboratorio concertado, que analiza la muestra con la técnica de referencia.
En caso de realizarse un análisis por un accidente de tráfico, se solicita la extracción y se guarda en una nevera con custodia hasta que llegue la Orden judicial con la autorización para en análisis; posteriormente, se envía a un laboratorio homologado para hacer las técnicas de referencia.
Desciende el número de conductos bajo los efectos del alcohol
Sáez Aguado ha reconocido que el número de conductores que conduce bajo los efectos del alcohol ha descendido "de forma muy notable" desde el año 2000, cuando un 12,8 por ciento de los conductores aseguraba haber cogido su vehículo después de haber consumido alcohol, frente a un 4,2 por ciento en la actualidad.
"Es algo en lo que tenemos que mejorar", ha insistido el consejero. Para ello, ha explicado, se han llevado a cabo otras iniciativas para potenciar el papel de los profesionales de la salud en la detección e intervención precoz para prevenir el consumo de drogas y sus consecuencias, con una intensa colaboración entre la Consejería de Sanidad y el Comisionado autonómico para la Droga.
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