La
falta de anestesistas ha llevado al
director gerente del Hospital Universitario de Burgos (HUBU), Miguel Ángel Ortiz de Valdivielso, a cerrar
72 camas del centro durante este verano.
En declaraciones a la
Agencia Efe, ha explicado que la imposibilidad de sustituir a los anestesistas, porque no hay ninguno en la bolsa de empleo,
hace que se reduzca la actividad de quirófanos, lo que también
reduce la ocupación de camas, por lo que "no sería lógico mantener el centro con todas las camas operativas en todo momento, c
uando la ocupación en este momento está entre el 65 y el 70 por ciento".
De hecho, el centro mantiene abierta de forma permanente una oferta de empleo estable para hasta quince anestesistas para completar su plantilla, que actualmente es de
39, aunque por diversas razones, fundamentalmente bajas laborales,
solo cuentan con 33 activos.
Esta situación empeora en verano, según ha explicado Ortiz de Valdivielso, porque se intenta desde el
centro que los anestesistas cojan las vacaciones de forma escalonada, pero al no poder sustituirles, en este momento
solo hay veinte trabajando.
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