La gerencia del
Servicio de Salud del Principado de Asturias (Sespa) va a
adscribir funcionalmente al personal que presta sus servicios los llamado Servicios de Urgencia de Atención Primaria (
SUAP) a la Unidad de Coordinación del Programa Marco de Atención a Urgencias y Emergencias (conocida como
SAMU), como paso para dar cumplimiento a las
reivindicaciones de sus trabajadores, que denunciaban condiciones laborales
peores que los del SAMU.
El Boletín Oficial del Principado de Asturias (BOPA)
publica este miércoles una resolución en virtud de la cual el SUAP pasará a depender orgánicamente del SAMU “para
continuar la homologación del personal estatutario de emergencias”. Esto implica que se pone a los trabajadores del SUAP bajo la coordinación del jefe del SAMU, “dando un tratamiento unitario a la gestión y al funcionamiento de los distintos dispositivos que actualmente la integran”.
Los Servicios de Urgencia de Atención Primaria (SUAP) se crearon por Acuerdo entre el Insalud y las organizaciones sindicales, de 23 de noviembre de 2001, a partir de los antiguos Servicios Normales de Urgencia y Servicios Especiales de Urgencia (SNU y SEU). En aquel momento se estableció su
dependencia de las
Gerencias de Atención Primaria.
Reivindicaciones
Desde hace años los profesionales de los SUAP, vienen reivindicando mejoras respecto a sus
condiciones laborales y salariales. El gobierno asturiano ha decidido que es hora comenzar a satisfacerlas y reconoce que es “necesario ir avanzando en la definición de un
nuevo modelo de organización de las
urgencias que mejore la calidad del servicio y las condiciones de trabajo de sus profesionales”.
Con este objetivo, y teniendo en cuenta las especiales características del trabajo desarrollado por este colectivo (jornada nocturna, peligrosidad, penosidad, festividad…) la Administración ha empezado a mejorar algunas condiciones. En concreto, los médicos del
SUAP cobran desde abril
344 euros extra al mes por turnicidad, un complemento específico que equipara su salario con el del personal del SAMU, algo que reclamaban los
sindicatos desde 2007.
La nueva resolución significa continuar avanzando en la misma dirección e implica, entre otras cosas, que todas las plazas del personal que resulten vacantes en el primero serán transformadas en plazas dependientes de la
plantilla orgánica de los Servicios Centrales.
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