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El Sespa unifica los procedimientos de contención en Salud Mental

El Gobierno regional ha elaborado un protocolo para garantizar la seguridad y los derechos de sus pacientes

José Ángel Arbesú.

07 mar 2018. 11.20H
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POR REDACCIÓN
El Servicio de Salud del Principado (Sespa) ha elaborado un protocolo de contención que unifica los procedimientos de aplicación para sus dispositivos. El objetivo es garantizar la seguridad y los derechos de los pacientes. El gerente del organismo, José Ramón Riera, y el responsable de la Unidad de Coordinación de Salud Mental, José Ángel Arbesú, presentaron el día 6 de marzo el documento a representantes de distintas asociaciones de pacientes.

El Gobierno regional explicó que este texto ha sido redactado por un grupo de trabajo multidisciplinar de profesionales con el apoyo de varios comités de bioética. También destacó que "se trata de una importante herramienta para el personal del Servicio de Salud, cuyas intervenciones están basadas siempre en el respeto a los derechos y la dignidad de las personas".

La contención incluye todos los procedimientos preventivos, verbales, farmacológicos y mecánicos que se utilizan para limitar los movimientos de un paciente en situaciones en las que resulta necesario garantizar su seguridad y la de terceras personas. El coordinador de Salud Mental explicó que siempre se realiza en beneficio del paciente y que forma parte del proceso de tratamiento para evitar alteraciones en el plan terapéutico.

Los profesionales optarán por las ténicas menos restrictivas

El nuevo protocolo establece las condiciones de aplicación de los procedimientos como recurso terapéutico, incide en la importancia de la prevención y la formación continuada del personal -tanto en la aplicación del procedimiento técnico más conveniente en cada momento como en la información al paciente y la familia- y en el cuidado de la persona atendida.

Además, establece que en el caso de que los profesionales deban aplicar técnicas de este tipo siempre se optará por la que resulte menos restrictiva, como las de contención ambiental y verbal. Sólo se aplicará la psicofarmacológica cuando sea necesario. El último recurso, si resulta totalmente imprescindible, será la contención mecánica. Un ejemplo del modelo por el que apuesta el Sespa es el desescalado verbal: intervenciones que ayudan a reducir la agitación del paciente de forma progresiva hasta llegar a un estado de control.

El Servicio de Salud del Principado, para formar al personal en este tipo de técnicas y divulgar el contenido del protocolo, organizará una jornada en el Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA). Ésta se sumará a las que imparten habitualmente los trabajadores de la red de Salud Mental.

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