El consejero de Sanidad asturiano,
Francisco del Busto, ha tenido que responder en la Junta General (Parlamento autonómico) el nombramiento de
Luis Hevia como gerente del Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA), ante las preguntas de la oposición. Y, más que defenderse frente a los que ponían
en tela de juicio los criterios de la elección, Del Busto ha terminado por admitir que al nuevo gerente le une
“una relación de la máxima confianza”.
Del Busto respondía a una pregunta parlamentaria del PP, partido que ha criticado tanto el nombramiento como todo el proceso de selección, que hubo de repetirse tras quedar desierto antes del verano. Según los socialistas, la Consejería de Sanidad buscaba “un socialista dúctil y maleable, y no un profesional de la gerencia”. El diputado popular Carlos Suárez interpeló al consejero en estos términos y
definió el proceso de selección como “un paripé”.
Una llamada para convencer a Hevia
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Imagen publicada por La Nueva España en la que se ve a Del Busto y Hevia (centro), junto con el exconsejero Sariego, en 2005.
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“De usted se espera orientación política y no gestión política. Si lo que quería era gestionar un gran hospital, no es éste el camino”, señaló Suárez, a juicio de quien no tiene sentido organizar un proceso público de selección (y repetirlo) para después resolver el asunto “con una llamada”.
El popular se refería a lo revelado en una conversación que tuvo el consejero el pasado 1 de septiembre con varios periodistas en los pasillos de la Junta General. En ella, Del Busto desvelaba que desde un principio se quería a Hevia y que incluso
se le llamó para convencerle.
El periódico asturiano
La Nueva España reproduce así las palabras de Del Busto: “[Hevia] no se había presentado al primer concurso. Se había hablado con él en el primer concurso, en aquel momento estaba de baja por un accidente importante que tuvo yendo a un aviso domiciliario. En aquel momento no le parecía conveniente comprometerse, por su situación. En esta situación
sí hemos conseguido que verdaderamente se comprometiese a entregar sus papeles y a solicitar su convocatoria y su aceptación en la convocatoria de este concurso”.
Comisión de valoración
En su respuesta a Suárez, el consejero de Sanidad ha negado primero haberse referido al concurso ante los medios de comunicación (pese a los numerosos testigos de la citada conversación), para a continuación descartar haber tenido ninguna influencia en el proceso de selección. Pero también ha reconocido de alguna manera
su preferencia por Hevia. Del Busto ha subrayado que “no es baladí” que entre el gerente y el consejero de sanidad exista “una relación
de la máxima confianza”, ya que el gerente gestiona anualmente “500 millones de euros y más de 7.000 empleados”. La relación de Del Busto con Hevia viene de largo. Ambos compartieron cargos en Sanidad en la época que Rafael Sariego era consejero.
Pese a todo esto, el consejero ha señalado que una
comisión de valoración valoró la idoneidad del candidato elegido y que “ningún miembro del consejo de administración planteó observación alguna ni al proceso ni a la propuesta de candidato”. El consejero ha desvelado que “solo cuatro candidatos”, de los trece que se presentaron, pasaron el primer corte y ha insistido que se ha premiado al candidato
con mayor experiencia. Años atrás, Luis Hevia fue gerente del Hospital de Cabueñes, de Gijón.
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