La
contratación de médicos que no han completado la especialidad MIR se ha convertido en una tónica habitual en la sanidad autonómica para hacer frente a las dificultades marcadas por la escasez de profesionales. Esta fórmula se ha repetido a lo largo de los últimos meses en diferentes puntos del territorio nacional, ya sea para cubrir aquellos
puestos de difícil cobertura más alejados de las grandes ciudades o para hacer frente a los refuerzos de personal durante
las campañas de vacaciones. Para poder sortear los límites legales, las administraciones autonómicas han recurrido a fórmulas como los
contratos de ‘sillas calientes’, que permiten dar prioridad a los especialistas si finalmente deciden presentarse a una plaza vacante.
Un ejemplo de este tipo de contratación es el que ha puesto en marcha el
Gobierno de Aragón que actualmente dispone de una plantilla de
68 médicos que no han cursado el MIR pero que, en algunos casos, están pendientes de homologar definitivamente la especialidad. El Ejecutivo ofrece a estos facultativos que no han hecho la residencia contratos que se tienen que renovar mes a mes, de manera que puedan liberar la plaza en caso de que sea necesario.
“Si apareciera algún médico especialista inscrito en bolsa en la plaza que están ocupando se prioriza al ser especialista”, han apuntado fuentes de la Consejería de Sanidad en una respuesta parlamentaria remitida a Las Cortes.
En todo caso, esta fórmula no tiene visos de convertirse en un mecanismo definitivo ya que el Gobierno autonómico ha reconocido que está
“estudiando varias opciones” para solventar el debate sobre los médicos extracomunitarios que ejercen sin el MIR. Entre las posibles soluciones, han planteado como “principal y prioritaria”
guiarles para que terminen realizando la especialidad en España. “Todos los médicos sin especialidad que están trabajando en Aragón tienen el título de Medicina homologado y están colegiados. Algunos además tienen la especialidad, pero en fase de homologación”, han apostillado.
Paralelamente, la administración también ofrece otro tipo de formaciones complementarias para que los médicos puedan adaptarse a las particularidades del Servicio Aragonés de Salud. En Huesca, por ejemplo, se les
ofrecen cursos de RCP, urgencias extrahospitalarias, control de diabetes, HTA, EPOC, entre otros, además de un curso de iniciación y continuación en OMI, el programa informático que se utiliza en Atención Primaria. La idea es hacer extensible esta labor formativa a todo el conjunto de la comunidad autónoma.
Médicos sin MIR con contrato en España
La situación de
los médicos sin MIR cobró relevancia en la agenda política aragonesa después de que la Consejería de Sanidad anunciase que en noviembre se iban a incorporar cuatro nuevos facultativos procedentes de otros países para hacer frente a la presión asistencial en Ejea de los Caballeros (Zaragoza). Sin embargo, no es un problema limitado a esa comunidad autónoma.
Cataluña también ha reconocido que tiró de médicos no especialistas este verano para cubrir las vacaciones de los titulares. Mientras que Castilla y León también recurrió a esta fórmula hace un año para
garantizar la presencia de profesionales en zonas rurales. “Hay que utilizar todos los medios que haya, aunque no sean los óptimos”, defendieron entonces.
No obstante, la contratación de médicos sin MIR no cuenta con el beneplácito del Ministerio de Sanidad. Consultada por
Redacción Médica sobre este asunto, la ministra,
Mónica García, insistió en que la actualidad legalidad vigente no contempla el fichaje de estos profesionales, algo en lo que difiere con algunas de las comunidades implicadas.
“Se puede ejercer la profesión siempre y cuando seas especialista, vía MIR o vía homologación, lo demás son trampas”, zanjó tras la última reunión del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (SNS).
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