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Adiós al cirujano y traumatólogo que dio 44 años al Clínico de Zaragoza

Se jubila después de realizar más de 7.000 intervenciones en su carrera profesional

Rodeado de compañeros del Servicio de Traumatología, el día de la despedida.

25 sep 2024. 16.15H
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Este mes de septiembre se ha concretado el adiós de un cirujano ortopédico y traumatólogo histórico en el Hospital Clínico Lozano Blesa de Zaragoza, y muy significativo en el panorama nacional de la especialidad.

Después de 44 años como médico en el hospital maño (con dedicación exclusiva), y cerca de 7.000 intervenciones, Jorge Albareda Albareda se ha jubilado de la asistencia pública, con 69 años.

"Se marcha una institución", ha comentado en redes sociales un traumatólogo de este Servicio que Albareda comandó desde 2010 hasta estos días.

Albareda llegó al Clínico zaragozano en 1980, como médico interno residente (MIR), tras licenciarse en Medicina en la Universidad de Zaragoza, donde también se doctoró. En este hospital se formó como médico especialista en Cirugía Ortopédica y Traumatología, y antes que jefe de Servicio fue jefe de Estudios, cargo que ha desempeñado durante casi 20 años, y que le ha servico para conocer a cerca de un millar de residentes.

Jorge Albaneda, en una imagen de cuando presidió el comité organizador del Congreso Nacional de la SECOT.


Se va cuando acaba de dejar también la presidencia de la Sociedad Española de Cirugía de Cadera (SECCA), que presidía desde 2022, y en la que ha cedido recientemente el testigo a Fernando Marquéz López, del Hospital del Mar de Barcelona.

Su experiencia como especialista llegó hasta el Ministerio de Sanidad, donde formó parte de la Comisión Nacional de Traumatología. Igualmente fue el presidente del comité organizador del Congreso que la Sociedad Española de Cirugía Ortopédica y Traumatología (SECOT) celebró en Zarazoza en 2019.

La despedida de Albareda se ha dejado notar más allá de su Servicio de Traumatología, y compañeros de otras especialidades también han tenido unas palabras en la esfera social: "gran profesional, excelente persona, compañero y amigo. Desde el Servicio de Oftalmología del Hospital Clínico Universitario Lozano Blesa le deseamos todo lo mejor en la nueva etapa que va a comenzar".

Aunque el final de los cuatro años de prórroga y una complicación en su salud hace unos meses le han llevado a la jubilación de la asistencia, seguirá ligado a la docencia y a la investigación.
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