La
Escuela Andaluza de Salud Pública (Easp) ha recibido hoy su
tercera certificación de calidad como centro de formación, reconocimiento que otorga la Consejería de Salud y Familias a través de la Agencia de Calidad Sanitaria de Andalucía (Acsa), entidad de evaluación y certificación integrada en la
Fundación Progreso y Salud.
Con este reconocimiento, la Easp renueva su compromiso con la mejora de sus procesos y con la
calidad de las actividades formativas que ofrece al sistema sanitario, garantizando que su actividad se ajusta a los
criterios de calidad definidos en el manual de estándares de la Acsa para entidades proveedoras de formación continuada. Estos estándares evalúan aspectos referidos a sus procedimientos de actuación, los mecanismos de seguimiento y evaluación de los procesos de aprendizaje, así como la adaptación de los recursos al desarrollo óptimo de su oferta de formación continuada sanitaria.
La entrega de este distintivo se ha celebrado en el salón de actos de la Escuela Andaluza de Salud Pública, en Granada, con un evento presidido por el secretario general de Investigación, Desarrollo e Innovación en Salud, Isaac Túnez Fiñana. El acto ha contado con la presencia de la directora gerente de la Easp,
Blanca Fernández-Acsa,
José Ignacio del Río Maza de Lizana; así como de una representación del equipo directivo y técnico de la entidad granadina.
Easp: 78 áreas de mejora
Durante el acto, la directora gerente de la Escuela Andaluza de Salud Pública ha recogido en nombre de toda la institución el certificado que acredita la finalización del proceso y la obtención del
nivel ‘Óptimo’ de calidad, un reconocimiento que la Easp
ya obtuvo en 2010 y 2015, y que ahora renueva hasta 2025. En este sentido, cabe destacar que la Easp y la línea Iavante de la Fundación Progreso y Salud son las únicas entidades andaluzas que cuentan con este nivel de certificación, el segundo de los tres previstos por el modelo de la Acsa y que exige un alto cumplimiento en estándares asociados a la innovación y al mayor desarrollo del proceso formativo.
La
autoevaluación realizada por cerca de 40 profesionales de la Easp ha permitido identificar 78 áreas de mejora y resolver casi un tercio de ellas durante el propio proceso de certificación. Además, en su informe final los evaluadores de la Acsa han puesto de manifiesto aspectos de la actividad que han sido considerados verdaderas fortalezas de la actividad de la entidad granadina, como son la innovación en metodología docente, la comunicación de su oferta formativa o los mecanismos de evaluación y análisis de expectati-vas y resultados.
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