El
Hospital Virgen del Rocío ha llevado a cabo por primera vez en Andalucía la
reconstrucción de la caja torácica de un paciente con una prótesis a medida fabricada con titanio. Se trata de la primera vez que en la región se lleva a cabo este tipo de cirugía, por la cual se ha implantado una prótesis ósea que incluye un tercio superior del esternón y la articulación de la clavícula para lograr la movilidad total del hombro.
Este tipo de intervenciones se habían llevado a cabo antes en Bilbao, pero de menor envergadura. En concreto, el objetivo de la operación ha sido
frenar un sarcoma inducido por un tratamiento anterior de radioterapia por otro adenocarcinoma de glándula submaxilar del que el paciente llevaba unos seis años tratándose y que, tras varias intervenciones, se seguía reproduciendo. Los especialistas en Cirugía Maxilofacial lo detectaron, en una consulta de seguimiento.
De este modo, se trata de una operación muy compleja no solo por la gravedad del tumor, sino también por su ubicación. Fue fundamental el trabajo de los especialistas en
Anestesiología y Reanimación del hospital, que mantuvo al paciente durante 12 horas en el quirófano.
La intervención se realizó así sobre un hombre de 61 años que ya se encuentra de alta en su domicilio, y cuya
recuperación está siendo muy favorable ya que ha recobrado totalmente la movilidad, es autónomo, y aunque continúa recibiendo asistencia en el servicio de Rehabilitación, disfruta de una buena calidad de vida.
Cirugía torácica multidisciplinar
Esta intervención ha sido posible gracias al grupo de
especialistas multidisciplinares del Hospital Virgen del Rocío, liderado por el especialista en Cirugía Torácica,
Javier de la Cruz. El equipo incluyó además a especialistas en
Oncología y en Cirugía Plástica y Reparadora.
De este modo, al inicio de la intervención, tuvieron que salvar una zona muy vascularizada por el riesgo fatal que supone la rotura de estos vasos sanguíneos. Y en el mismo acto,
reconstruir la zona con las prótesis hechas a medida para el paciente a partir de imágenes en 3D.
La prótesis quedó fijada a los huesos con tornillos de titanio y con ligamentos de cadáver que proporcionó el
banco de tejidos. Además, a las articulaciones de la clavícula se les hizo un refuerzo con tendones del extensor largo del pie, de unos 30 ó 40 centímetros, que también fue facilitado por el banco tumores. Por su parte, sobre la
prótesis, los cirujanos plásticos hicieron un injerto con un colgajo de vasto externo del muslo del propio paciente.
Este
prototipo fue fabricado y suministrado por la empresa habitual con la que trabaja el Hospital Universitario Virgen del Rocío. Además, en esta ocasión, también ha trabajado un grupo de
ingenieros biomecánicos de Las Palmas en el diseño del implante.
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