Cristina Alcalá. Madrid
De cara a los próximos comicios en Andalucía, previstos para el 22 de marzo, el Partido Popular en esta comunidad está ultimando el programa electoral que presentará ante los ciudadanos. Una hoja de ruta compuesta por diez puntos básicos que perfilarán este fin de semana, a través de una reunión conjunta del grupo asesor en sanidad, y que presentarán en las próximas semanas en un acto en el que esperan esté el candidato andaluz a la Junta, Juan Manuel Moreno Bonilla, acompañado por el ministro de Sanidad, Alfonso Alonso.

Bajo el nombre ‘Sanidad andaluza caminando hacia Europa’, este decálogo es una ampliación del programa que presentaron en las anteriores elecciones, donde no solo incluirán el tema de la gestión clínica, sino que también abordarán la financiación del sistema (prometen que elevarán los presupuestos destinados a sanidad y priorizarán en materia de salud pública y Atención Primaria), la contratación del personal sanitario (acabando con los contratos precarios y no sustentados únicamente en eventuales) y la situación de las listas de espera en la autonomía, entre otros asuntos.

“Otra sanidad en Andalucía es posible”

Según el portavoz de esta materia en el Senado, Jesús Aguirre, Andalucía está a la cola de España en cuanto al ratio de enfermero y médico por habitante, al destinar únicamente 1.034 euros habitante/año. Un presupuesto, a su entender, insuficiente, ya que no solo se cubren las plantillas, sino que además, es la comunidad donde más empleo de este sector se destruye. “Otra sanidad en Andalucía es posible”, alega.

En materia farmacéutica y ante el anuncio de la Junta de Andalucía de convocar una sexta subasta de medicamentos, Aguirre mantiene la postura que su partido ha llevado todo este tiempo, asegurando que “los medicamentos tienen que ser acceso universal” y que “ninguna comunidad autónoma puede ir en contra de la equidad y cohesión” del sistema. Una competencia, asegura, exclusivamente del Ministerio de Sanidad y del Gobierno central.  

Aguirre, convencido que su partido ganará los comicios autonómicos y que el próximo presidente de Andalucía será Moreno Bonilla, se muestra precavido a la hora de confirmar si entra en las quinielas del candidato popular para ocupar un cargo en la Consejería de Salud. “Él sabrá formar el gabinete que crea más oportuno y yo estaré a disposición de mi partido. Tiempo al tiempo”.

Las UGC las pueden liderar no sanitarios

Entre otros aspectos, el dirigente popular ha señalado que su partido no descarta la posibilidad de que las unidades de gestión clínica (UGC) puedan estar lideradas por profesionales no sanitarios, en relación al desacuerdo que actualmente existe entre médicos y enfermeros por fijar quién de los dos debe encabezarlas.

Preguntado por quién de los dos colectivos de profesionales debe ser el encargado de llevar las riendas de estas unidades, Aguirre ha sido muy tajante: “la gestión clínica siempre debe estar en manos del que esté más capacitado. No por ser un buen médico o un buen enfermero puede ser un buen gestor clínico”.

Según el senador, “la gestión clínica no tiene por qué llevarla, ni siquiera, ningún sanitario”, sino que esta figura debe ser elegida por otras connotaciones, como el conocimiento y aptitudes que tenga en base a la toma de decisiones y el trabajo en grupo, entre otros aspectos. “Y además, lógicamente, debe estar consensuado por el propio equipo”. “Hay que tener en cuenta que la gestión clínica apareja el manejo de muchísimo dinero. Hay gestores, con experiencia en el mundo sanitarios y con máster sanitarios que pueden ser muy cualificados”, se ha posicionado.

El liderazgo en las unidades de gestión clínica ha sido un tema muy debatido por los diferentes sectores sanitarios y que incluso se integra en los pactos firmados en La Moncloa ante la presencia del presidente del Gobierno para desarrollo. No obstante, ahora el PP ofrece una visión nueva en la que amplía la posibilidad de que sean otros trabajadores los que encabecen estas unidades.