La Junta de Andalucía ha
recurrido ante el Tribunal Supremo (TS) la resolución del Tribunal Superior de Justicia (TSJA) que suspende cautelarmente la medidas acordadas por la Junta para imponer la
vacunación obligatoria contra el Covid-19 de sanitarios y la obligatoriedad de realizar pruebas diagnósticas periódicas a todos los trabajadores de residencias de mayores y en centros sanitarios y sociosanitarios.
Unos recursos que han sido anunciados por el consejero de Salud y Familias, Jesús Aguirre, en unas declaraciones a los periodistas durante su visita a Córdoba donde ha reivindicado que "
en una pandemia debe prevalecer el bien común por el individual". Motivos por los cuales ha vuelto a insistir a la ministra de Sanidad para que haga igual que Francia y declare la vacunación obligatoria entre sanitarios.
El diriguente cree que el
TSJA le "va cortando las alas" a la Junta de Andalucía en su lucha contra la persistencia del Covid-19 en las residencias y centros sanitarios, pues, ante la negativa a vacunarse de algunos trabajadores, Salud pretendió la vacunación obligatoria de estos empleados, lo cual ha rechazado el alto tribunal andaluz, y después el que, al menos, se les puedan hacer "PCR dos veces en semana", lo que también ha sido rechazado por el TSJA.
Por esta razón, la Junta ha recurrido en casación ante el TS dichas resoluciones, ya que, según manifiesta Aguirre,
"quitan las armas" a Salud para combatir al coronavirus. Algo que para Aguirre se debe a que
"no hay una Ley de Salud Pública y no se ha producido ningún cambio legislativo" para adaptarse a la pandemia, "y eso es achacable al Gobierno central".
Aguirre pone fecha para comenzar con la dosis de refuerzo
Respecto a la tercera dosis de la vacuna del Covid-19, Aguirre ya ha puesto fecha para comenzar con su aplicación.
“Espero que para finales de la semana que viene se pueda comenzar la vacunación con tercera dosis de los pacientes inmunodeprimidos”, ha señalado en declaraciones a los periodistas en Córdoba.
Una dosis de refuerzo que Andalucía había pedido en los dos últimos consejos interterritoriales para los inmunodeprimidos, los pacientes con un tumores sólidos y enfermedades hematopoyéticas o aquellos que, como consecuencia del tratamiento de su patología, no tienen capacidad de desarrollar un volumen suficiente anticuerpos para protegerlo contra la infección.
“Esto es apropiado porque ya no tenemos un déficit de vacunas, y tenemos a estas personas perfectamente catalogadas de alto riesgo”, ha defendido Aguirre, quien espera contar con la aprobación definitiva el miércoles que viene y empezar así a vacunar a finales de semana a todas las personas de alto riesgo.
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