El Boletín Oficial de la Junta de Andalucía ha publicado este martes el acuerdo que aprueba el
I Plan Estratégico Andaluz para la Vigilancia y Control de Vectores Artrópodos con Incidencia en Salud (PEVA). En el documento se aborda la formación de los profesionales de la salud, y como esta es "fundamental" para minimizar los riesgos. El texto indica que se diseñará un plan de formación e información de ETV (enfermedades transmitidas por vectores) dirigida a los sanitarios y a la población general.
El acuerdo subraya que el objetivo del plan es proteger la salud y el bienestar de la población andaluza mediante medidas y actuaciones intersectoriales, destinadas a
reducir la incidencia de enfermedades transmitidas por vectores artrópodos, tales como garrapatas, mosquitos, pulgas o piojos, potenciando y coordinando las actuaciones de vigilancia y control en los ámbitos humano, animal y ambiental. Este plan se llevará a cabo bajo la responsabilidad de la Dirección General de Salud Pública y Ordenación Farmacéutica, que realizará una evaluación del mismo a los dos años de su puesta en marcha y tras su finalización, en 2028.
Formación para sanitarios
Las enfermedades transmitidas por vectores (
malaria, exantemática mediterránea,
dengue, fiebre del Nilo Occidental o leishmaniosis, entre otras), cuya reemergencia se vincula al cambio ambiental global, suponen actualmente el 17 por ciento de las enfermedades transmisibles a nivel mundial y causan más de 700.000 muertes al año en el mundo. Según datos de la Consejería, en 2022 se declararon en Andalucía casos importados, confirmados y probables de dengue (47) o malaria (101), o autóctonos como leishmaniasis (76) o Fiebre del Nilo (2), que
causaron tres muertes en la comunidad autónoma a pacientes, en la mayoría de los casos, con patologías previas, una por leishmaniasis (varón de 81 años), una por paludismo (mujer de 68 años) y una por fibroma no osificante (mujer de 84 años).
Por ello, la Consejería de Salud suubraya que es
"fundamental" la formación de los profesionales que trabajan en salud para el "abordaje integral" de las ETV. De esta manera, se busca minimizar los riesgos para la salud y trasladar una correcta información a la ciudadanía es imprescindible para que pueda adoptar las medidas necesarias de
prevención y protección en cada circunstancia. Para ello, se diseñará un plan de formación e información de ETV que incluirá una estrategia de comunicación dirigida a los profesionales y a la ciudadanía.
Asimismo, se realizará difusión de campañas informativas y cartelería específicas por vector para la prevención de su transmisión, poniendo especial énfasis en las medidas de protección individual y la vacunación. Además, se desarrollarán acuerdos formales como convenios o contratos estables en el tiempo entre la Junta de Andalucía y los organismos de investigación y universidades para
promover la investigación sobre los vectores y las enfermedades que transmiten, así como todos los factores implicados.
Para realizar una gestión coordinada de y dar pie a la cooperación de los agentes implicados, el plan conformará un
equipo multidisciplinar e intersectorial en el marco de
'Una Sola Salud'. "Tener identificados a los agentes y entidades implicadas en el desarrollo de este Plan, con sus responsabilidades y competencias, garantiza la colaboración adecuada y fluida, permitiendo una gestión eficaz de las ETV bajo el liderazgo de la administración sanitaria", sentencia el acuerdo.
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