"La innovación sanitaria pública debe colaborar con el sector privado"

La innovación es la capacidad de convertir en resultados reales y medibles la investigación. Algo que es clave en un sector como el de la sanidad, en donde este proceso se traduce en una mejora de los resultados en salud y en donde es fundamental la colaboración público-privada. Por eso, la Consejería de Salud de la Junta de Andalucía ha buscado la fórmula para “organizar y armonizar la compra pública de innovación sanitaria", algo que se ha visto reflejado en su nuevo Programa de Compra Pública de Innovación en Salud.

“La compra pública innovadora es un sistema peculiar y diferente de hacer investigación, porque trata de dar respuesta a una necesidad que se pone en evidencia y que no se encuentra en el mercado porque hay carencias”, explica en una entrevista en Redacción Médica Isaac Túnez, secretario general de Salud Pública e Investigación, Desarrollo e Innovación de la Junta de Andalucía. Bajo esta premisa nace el citado programa, que tiene como finalidad convertirse en una herramienta para que las instituciones sanitarias de la región, los profesionales sanitarios y los propios pacientes detecten necesidades en salud que aún no tienen respuesta y que requieren de esta; apoyándose en la participación sel "sector privado".

“Cuando se detecta una necesidad, esta se capitaliza y da pie a que el sistema de una respuesta”, explica Túnez, quien reconoce que la compra pública de innovación “lleva años” en el Servicio Andaluz de Salud (SAS). Sin embargo, reconoce que “hace cuatro años, cuando llegamos a la Junta (en alusión al Gobierno del Partido Popular presidido por Juanma Moreno), estaba dormida”. “Los anteriores equipos tenían intenciones, pero no se había hecho nada ni se logró culminar ningún proyecto de compra pública innovadora”, lamenta.

Es por eso que nace este programa que persigue “orquestar” la compra pública de innovación sanitaria para, según indica, hacerla “evolucionar”. El primer objetivo de esta estrategia no es otro que la de poner en marcha un mapa de demanda temprana para detectar las necesidades del SAS, y así comenzar a “materializar proyectos de interés”.

Asimismo, Túnez considera que el concepto de esta adquisición, en el ámbito sanitario, significa “caminar hacia la colaboración público-privada, que siempre ha jugado un papel importante pero, ahora más que nunca, se pone en valor”. “Todos los agentes que intervienen en el proceso deben caminar todos en la misma dirección y dar con la respuesta que los ciudadanos demandan de una manera sostenible y colaborativa”, subraya.

"Tenemos que creernos el nivel de innovación, ponerla en valor y perder el miedo a decir lo que hacemos"

El secretario general de Salud Pública e Investigación, Desarrollo e Innovación de la Consejería de Salud también incide en que este programa cuenta con el apoyo del sector privado. Además, pone de manifiesto que el nivel de la modernización tecnológica sanitaria andaluza se sitúa entre las mejores de España, al tiempo que sostiene que, en el caso de la española, “está al nivel de cualquier país europeo”. “Pero nos lo tenemos que creer y ponerlo en valor, y perder el miedo a decir lo que somos y lo que hacemos”, ha asegurado.

Por último, indica que “la investigación viene evolucionando desde hace mucho”. “Estamos en nuevo paradigma en que las nuevas tecnologías lo han cambiado todo”, argumenta, por eso, entiende que en este nuevo contexto “lo que se pone en circulación desde la innovación pública también debe generar un retorno para el ciudadano”. “Es una nueva forma de investigar, ya que ahora las administraciones públicas generamos conocimientos que, cuando se aplican, son innovación basada en el impacto” y, por lo  tanto, redundan en una mejora de “los servicios públicos”.

El desarrollo de este programa irá dirigido a cubrir las necesidades y prioridades de promoción y atención a la salud que están enfocadas en la prevención, el diagnóstico, el tratamiento y la rehabilitación de las patologías más frecuentes, “muchas de ellas enfermedades crónicas”, así como de forma simultánea a enfermedades de baja prevalencia y ultra-raras cuyas posibilidades diagnósticas y terapéuticas que “exigen nuevos programas de generación y gestión del conocimiento”, según el documento de la estrategia, a la que ha tenido acceso Redacción Médica.

Con este plan, también se espera consolidarla como instrumento de fomento desde la demanda del SSPA estableciendo las bases para su desarrollo, capaz de motivar el incremento de la inversión en investigación y desarrollo y, todo ello, contribuyendo “a la actividad innovadora en el tejido empresarial andaluz y a la generación de empleo”.